Los propietarios de computadoras pueden imprimir fácilmente el texto o la página deseada del sitio en una impresora. Los propietarios de teléfonos móviles se vieron privados de esta comodidad, pero el estudio Berg de Londres se comprometió a arreglar la situación, que presentó una impresora especial para el iPhone.
La necesidad de crear una pequeña impresora que pueda imprimir mensajes sms y otros textos ha estado madura desde hace mucho tiempo. Y a mediados de agosto de 2012, el estudio londinense Berg anunció la aceptación de pedidos de la miniimpresora que creó para teléfonos inteligentes con sistemas operativos iOS y Android. El nuevo dispositivo se llama Little Printer y cuesta 199 libras esterlinas. En los EE. UU., Se aceptan pedidos por $ 259, los primeros propietarios verán los nuevos dispositivos a mediados de octubre.
La nueva impresora hace honor a su nombre, ya que es muy compacta. Es cierto que su apariencia deja mucho que desear: es un pequeño cubo de plástico que cabe en la palma de su mano con un par de botones. La impresión se realiza en papel térmico, por lo que la Little Printer no requiere tinta. La impresora se suministra con un adaptador AC con diferentes tipos de salidas, tres rollos de papel térmico y un dispositivo especial BERG Cloud Bridge, con el que se puede transferir toda la información necesaria a la impresora.
Little Printer puede imprimir un feed varias veces al día, compuesto por la información que el usuario necesita, por ejemplo, el pronóstico del tiempo, mensajes de redes sociales, noticias, etc. Puede personalizar la información enviada a la impresora en la aplicación móvil, definiendo qué datos y con qué frecuencia deben imprimirse. Los socios del estudio Berg en este proyecto son grandes empresas: Google y Foursquare, el periódico británico The Guardian y otras publicaciones informativas.
Si bien el nuevo dispositivo es lo suficientemente interesante, los usuarios aún tienen que descubrir qué tan útil es. El pequeño formato de la impresión no permite mostrar imágenes y textos de gran tamaño, sobre todo se asemeja a un cheque de caja ordinario. La impresión en blanco y negro también impone sus limitaciones, además, el texto en papel térmico se desvanece con bastante rapidez, lo que significa que las cintas impresas se pueden almacenar por no más de unos pocos meses. La movilidad del dispositivo también inspira serias dudas: es poco probable que el propietario del teléfono inteligente lleve consigo la pequeña impresora, mientras que en el interior es posible usar una computadora, computadora portátil o tableta, imprimiendo los datos necesarios en una impresora normal. En su forma actual, lo más probable es que el nuevo dispositivo siga siendo una novedad divertida, ya que se cuestiona su utilidad y facilidad de uso.