En el sistema operativo Android, como en cualquier otro sistema operativo, las aplicaciones a veces se congelan. Si esto sucede, deben cerrarse a la fuerza. Para esto, así como para cambiar entre ellos, está destinado el administrador de tareas.
Instrucciones
Paso 1
Asegúrese de que la aplicación esté realmente congelada y que no haya forma de cerrarla de forma regular con el guardado preliminar de datos. A veces es suficiente esperar alrededor de un minuto y el programa comienza a reaccionar nuevamente a las acciones del usuario. Si la aplicación se cuelga y no se "despierta", deberá aceptar la pérdida de los datos no guardados por su cierre forzado.
Paso 2
Ingrese al administrador de tareas. No existe un estándar único sobre cómo se ejecuta en Android. En algunos teléfonos inteligentes, debe presionar dos veces rápidamente el botón de inicio, en otros, mantenerlo presionado durante mucho tiempo, y así sucesivamente. En las tabletas, suele haber un botón separado "Lista de aplicaciones".
Paso 3
En el teléfono, el administrador de tareas se abrirá en pantalla completa, en la tableta, se presentará como una columna vertical en el lado izquierdo de la pantalla. Puede verse como un mosaico de imágenes con subtítulos cortos o como una lista de líneas horizontales con imágenes, explicaciones y botones. Si simplemente hace clic en la imagen, irá a este programa. Algunos administradores de tareas continúan mostrando aplicaciones recientemente iniciadas pero cerradas. En este caso, al hacer clic en la imagen se reiniciará el programa.
Paso 4
Pero ahora tu tarea no es cambiar entre programas, sino cerrar el que "cuelga". Si hay un botón Cerrar en la línea correspondiente, haga clic en él y la aplicación desaparecerá de la lista. En el futuro, se puede iniciar de nuevo. Si no existe tal botón, "deslice" la imagen correspondiente a la aplicación, según el modelo del dispositivo, hacia arriba o hacia los lados. El resultado será el mismo.
Paso 5
Algunas aplicaciones, después de fallar y reiniciarse, ofrecen recuperar al menos parcialmente los datos no guardados perdidos. Acepte esto y vea cuál de los perdidos logró recuperar. No solo los editores tienen esta función, sino incluso algunos navegadores que restauran las pestañas cerradas y, a veces, el texto que escribiste en ellas.