La calidad de la imagen y el sonido de las transmisiones de televisión depende directamente de la capacidad de la antena para recibir una señal. Si la antena no es lo suficientemente potente o está colocada incorrectamente, entonces no puede haber una buena imagen o sonido.
Instrucciones
Paso 1
Preste atención a la ubicación de la antena. La altura a la que se encuentra la antena juega un papel importante en la recepción de la señal. No importa en absoluto si se trata de radio o televisión. Para fortalecer la antena interior, colóquela lo más alto posible. Si la antena es de tipo telescópico, debe estar completamente extendida para obtener la mejor recepción de señal.
Paso 2
Vea hacia dónde apunta la antena. Si hay obstáculos entre él y la fuente de señal, la recepción será naturalmente mala. Trate de colocar la antena de manera que no haya árboles grandes, edificios altos, cables eléctricos o cualquier otra estructura en su camino que pueda interferir seriamente con la recepción de la señal. De esta forma puedes amplificar la antena.
Paso 3
Utilice un amplificador de antena para hacer que la antena interior sea más potente. Este es un dispositivo especial que facilita la recepción de la señal. También intente utilizar una conexión a tierra adicional. La potencia de la antena apenas cambiará de esto, pero la señal será más clara. Cualquier antena es un circuito oscilante abierto. Cuanto mayor sea el área del circuito oscilante, mayor será la capacidad de recibir una señal que tenga. Cualquier cable largo puede servir como antena. Conéctelo a su antena interior. Esto aumentará su área y, en consecuencia, su potencia.
Paso 4
Utilice el último recurso si ninguno de los métodos anteriores funcionó. Reemplace la antena interior con una antena exterior. Una antena externa se adapta mucho mejor a la recepción de señales de alta calidad, especialmente porque hay muchas más posibilidades para su ajuste. Apunte la antena exterior en la dirección óptima para la recepción de la señal. Esto le ahorra la molestia de ajustarlo constantemente, como suele ser el caso de una antena interior.