Es casi imposible imaginar la vida de una persona moderna sin una cámara. Incluso si aún no tiene este milagro de la tecnología, probablemente tenga una cámara simple incorporada en su teléfono o una "jabonera" de película completamente antediluviana. ¿Cómo no equivocarse a la hora de elegir una cámara digital y qué hay que tener en cuenta para llevar a casa de la tienda exactamente lo que deseaba? Aprendiendo a elegir una cámara amateur.
Instrucciones
Paso 1
Preste atención al número de píxeles de la matriz. Las misteriosas características de cualquier cámara relacionada con este parámetro suelen ser percibidas por los aficionados con un ligero desconcierto. Mucha gente piensa que cuantos más píxeles, mejor, pero no es así en absoluto. Empiece de forma sencilla: piense para qué necesita una cámara. Si va a imprimir fotos en el formato estándar de 10x15, 2,5 megapíxeles son suficientes, para fotos de 13x18: 3,5 megapíxeles. Suena increíble, pero es un hecho. Créame, incluso en cámaras profesionales, 6 megapíxeles se considera un número suficiente, por lo tanto, si el vendedor le asegura que debe haber al menos 10 de ellos en su jabonera, no lo crea. Hay muchas otras características de una cámara digital que afectan la calidad de la imagen. Considere todo en el complejo.
Paso 2
Elija una cámara solo para usted. No piense que necesita comprar una cámara profesional y cara con una lente réflex y muchas funciones sofisticadas de inmediato. Una DSLR solo es buena si realmente tiene la intención de tomar fotos de manera profesional y cambiar lentes. Si su objetivo son solo imágenes de alta calidad sin pretender algo más, una cámara digital de alta calidad será suficiente para usted. Bien puede ser que alguna cámara sea realmente mejor que otra debido a funciones adicionales y la presencia de otros modos, pero si inicialmente no vas a usar nada de esto, ¿es lo mismo?
Paso 3
Presta atención a la interfaz de la cámara y a lo cómodo que te resulta usarla. A algunas personas les encantan las pantallas táctiles, a otras no. A algunas personas les gustan los botones brillantes, mientras que otras prefieren la sencillez y la concisión. Asegúrate de agarrar la cámara e intentar presionar los botones. Gíralo en tus manos. La sensación organoléptica es una de las cosas más importantes a tener en cuenta al elegir una cámara. Por eso es simplemente necesario que te sientas cómodo sosteniéndolo en tus manos y que el aspecto de la funda sea agradable a la vista. Además, estudie detenidamente qué tan conveniente es la interfaz del software y si comprende todo lo que hay en la configuración. Por supuesto, siempre se puede leer información adicional en las instrucciones, pero es mucho mejor obtener inicialmente una cámara con controles claros y una interfaz amigable.