Si su teléfono celular se cae al agua, no se apresure a dejarlo allí y busque uno nuevo. Si se toman medidas urgentes para restaurarlo, aún puede funcionar sin interrupción durante muchos años.
Instrucciones
Paso 1
Retire la tapa del dispositivo y desconecte la batería. Después de eso, retire la tarjeta SIM y la tarjeta de memoria. Ponlos a secar a temperatura ambiente, en ningún caso intente acelerar el proceso con un secador de pelo o radiador. Si el teléfono se cae al agua mientras se carga (por ejemplo, se dejó caer en un acuario interior), primero desconecte el cargador de la red eléctrica y solo luego retire el dispositivo del agua. Si la máquina se ha caído al agua y está conectada a una computadora, desconecte el cable de la computadora antes de sacarla del agua.
Paso 2
Compra un juego de destornilladores específico para desmontar teléfonos móviles. Los destornilladores comunes no funcionarán, solo estropearán las ranuras y será muy difícil desmontar el dispositivo. Entonces todo depende del factor de forma del teléfono móvil. Si se trata de una barra de chocolate, su desmontaje no requiere ninguna explicación especial. Si tiene un control deslizante o una concha frente a usted, asegúrese de encontrar en Internet instrucciones detalladas e ilustradas para desmontar el dispositivo de este modelo en particular.
Paso 3
Si su teléfono ha estado expuesto a agua salada, enjuague todas las partes excepto la pantalla y la batería con agua destilada. Para un aparato que se ha ahogado en agua dulce, este paso se puede omitir. Luego coloque todas las partes, también excepto la pantalla y la batería, en alcohol puro (el vodka no es bueno) y manténgalo allí durante varias horas. Después de sacarlos del alcohol, déjelos secar, lo que tardará un día. El uso de un secador de pelo y otros dispositivos de calefacción tampoco está permitido aquí.
Paso 4
Vuelva a ensamblar el teléfono en orden inverso, inserte la tarjeta SIM, la tarjeta de memoria y la batería. Si el agua estaba salada, es recomendable reemplazar esta última. Encienda el dispositivo y verifique su funcionamiento. Durante el próximo mes de uso de un teléfono móvil, sabrá con certeza si comenzó a funcionar con fallas o si la calidad de su trabajo no ha cambiado.