La empresa estadounidense Apple y la surcoreana Samsung son dos gigantes tecnológicos de la industria informática moderna, que hasta hace poco trabajaban juntas de manera bastante beneficiosa para ambas partes. Los dispositivos Apple todavía usan procesadores Samsung y RAM, pero claramente un gato negro corrió entre las compañías. El motivo fue la competencia directa entre los dos gigantes en el mercado de dispositivos móviles, en el que los estadounidenses también decidieron utilizar el apalancamiento judicial.
La compañía, con sede en la ciudad californiana de Cupertino, está presentando demandas en tribunales de todo el mundo, exigiendo prohibir la venta de dispositivos móviles de última generación de Samsung. Básicamente, las afirmaciones de Apple son que la compañía coreana usa elementos de diseño para la carcasa, gráficos de software y empaques muy similares al que usa la compañía con sede en Cupertino. Según los estadounidenses, esto engaña a los compradores y explota la reputación establecida de los dispositivos móviles iPad y iPhone, además de violar los derechos de propiedad intelectual. Samsung, a su vez, está presentando contrademandas, y esta guerra de patentes, que ya ha presentado casi tres docenas de patentes, continúa con éxito variable.
Un tribunal de California falló a favor de Apple, imponiendo una prohibición a la venta de tabletas Galaxy Tab 10.1 en el país hasta el final del proceso. En una demanda similar presentada por los estadounidenses en un tribunal holandés, hubo 10 puntos de reclamos, de los cuales el juez desestimó 9, aceptando solo la acusación de copiar el diseño de la interfaz. Pero esto resultó ser suficiente para suspender las ventas del nuevo dispositivo Samsung en los Países Bajos.
Colin Briss, juez de la Corte Suprema de Inglaterra dictaminó que Samsung no violó ninguna ley británica y ordenó a Apple que publicara una declaración en la versión en inglés del sitio web. El inglés resumió su decisión en el sentido de que Samsung no es tan cool como Apple, por lo que nadie se deja engañar por su apariencia, como afirma Apple. Poco después de esta decisión, un tribunal de Düsseldorf, Alemania, confirmó que la prohibición de las ventas de Galaxy Tab 7.7, que ya estaba en vigor en Alemania, debería permanecer en vigor. Además, debería extenderse a los 27 estados de la Unión Europea. Curiosamente, las ventas del Galaxy Tab 10, mucho más popular, continúan en este país.