Hoy en día, incluso los niños tienen teléfonos móviles y es difícil imaginar la vida sin ellos. Y una vez, las personas solo podían soñar con una herramienta que les permitiera comunicarse fácilmente con sus seres queridos que viven en otra ciudad u otro país. También hubo quienes intentaron hacer realidad este sueño.
Los primeros intentos de inventar el teléfono
La transmisión y recepción de sonidos por teléfonos modernos se produce a través de señales electromagnéticas. Los primeros instrumentos eran mecánicos y tenían un canal acústico directo, funcionaban en base al principio de propagación de vibraciones sonoras en un medio continuo, en este caso aire.
Los intentos de inventar un medio de comunicación por voz ocurrieron hace muchos siglos. El "teléfono de cuerda", en el que dos membranas estaban conectadas con una cuerda o alambre, se conoce desde hace mucho tiempo.
Por primera vez, Charles Boursel, subinspector del telégrafo e ingeniero mecánico parisino, utilizó la palabra "teléfono". Se le ocurrió la idea de la telefonía y en 1854, en su disertación, describió el principio del teléfono. Pero en la práctica, no se dio cuenta de su idea.
El alemán Johann Philip Reis diseñó en 1861 el dispositivo Telephon, capaz de transmitir el habla humana y los tonos musicales a través de cables. Estaba equipado con una batería galvánica como fuente de alimentación, un altavoz y un micrófono.
La invención del primer teléfono en toda regla
En 1871, el científico italoamericano Antonio Meucci solicitó una patente para un dispositivo de sonido por cable que inventó en 1860 llamado Telectrophon. Meucci aprendió sobre la posibilidad de convertir vibraciones sonoras en impulsos eléctricos y transmitir la voz a distancia a través de cables por casualidad. Practicó la medicina usando su generador eléctrico. Un día escuchó la voz de un paciente desde otra habitación con cables conectados a sus labios. Entonces, el inventor se dio cuenta de que la corriente eléctrica puede transmitir sonido a distancia. Sin embargo, no pudo obtener una patente para su invención a tiempo debido a las maquinaciones de una gran empresa y partes interesadas.
Pero Alexander Bell patentó en 1876 un teléfono llamado "telégrafo parlante". Su tubo podría recibir y transmitir el habla humana. La campana fue inventada un poco más tarde, en 1878, por una colega Bella Watson. La llamada se realizó mediante un silbato en el receptor, pero este mecanismo se limitó a un alcance de 500 metros. El aparato de Bell se mostró en Filadelfia en la Exposición Electrotécnica Mundial en junio de 1876.
Alexander Bell ha sido considerado oficialmente el inventor del teléfono durante más de un siglo. Sin embargo, el 11 de junio de 2002, el italiano Antonio Meucci fue reconocido como el inventor de este medio de comunicación, lo que quedó registrado en la resolución del Congreso de los Estados Unidos.
Desde principios del siglo XX, las líneas telefónicas se han desarrollado constantemente en el mundo, incluidas las internacionales.